martes, 6 de mayo de 2008

Polvo en el aire acondicionado

¿Dónde descansan las cenizas de Sid Vicious?

Primero, una bonita historia de amor.

La historia de amor entre Sid Vicious y Nancy Spungen merece un capítulo aparte en la historia del rock en general y del punk en particular. Y eso que ni siquiera duró un año; la relación sólo fueron once meses, ¡pero qué once meses!

Se conocieron en noviembre de 1977. Por entonces, Sid era ya era el polémico bajista de los no menos polémicos Sex Pistols (había sustituido en la banda a Glen Matlock, que echaron del grupo porque le gustaban demasiado los Beatles). En su historial se recuerdan “divertidas” anécdotas; como el día en que Vicious golpeó en la cabeza con el bajo a un espectador de la primera fila que había sacado una navaja. Eso entre otras más desagradables lindezas.

Ella provenía de una buena familia de Estados Unidos. Nancy era una groupie (persona que dedica su vida a perseguir a estrellas del rock para formar parte de su círculo, la mayoría de las veces con intereses sexuales), también ejerció la prostitución y entre sus aficiones estaba la droga (aunque Sid ya estaba familiarizado con los estupefacientes, ella pudo inducirle al consumo de heroína). Sid y Nancy estaban hechos el uno para el otro. El bajista se enganchó tanto de su compañera como de la heroína.

Si los Beatles tuvieron a Yoko Ono como una de las posibles razones de su disolución, Nancy Spungen fue la Yoko Ono particular de los Sex Pistols. Pero la banda no fue lo único que perdió Sid Vicious, la propia Nancy también desapareció rápidamente de la vida del bajista.

El 12 de octubre de 1978, el cadáver de Nancy amaneció en el baño de la habitación número 100 del hotel neoyorkino Chelsea. Spungen apareció apuñalada es está habitación, habitación que con el tiempo tuvo que ser demolida ya que se convirtió en un santuario de mitómanos. ¿Quién fue el principal sospechoso del crimen? Por supuesto, Sid Vicious, que se encontraba en el baño aturdido y semiinconsciente. El bajista alegó que ya estaba muerta cuando volvió al hotel para buscar un frasco de metadona para desengancharse de su adicción. Pero ese argumento no sirvió y Vicious fue encarcelado hasta que la compañía Virgin pagó la fianza. El misterio sobre la muerte de Nancy no quedó del todo resuelto.


El músico volvió a la calle, pero quería reencontrarse con su amor y diez días después de su puesta en libertad trató de suicidarse cortándose las venas; inmediatamente fue internado en un hospital psiquiátrico. El 2 de febrero, finalmente se salió con la suya; el incombustible Sid falleció a los 21 años como consecuencia de una sobredosis de heroína que su madre, Beverley, una hippie cuarentona, le había comprado. Junto al cadáver de Sid, se encontraba un poema dedicado a su querida Nancy. ¿Fue un suicidio? ¿Fue un accidente? El lema del punk, “No future”, se había cumplido. Vicious siguió la norma para convertirse en un mito como otros lo hicieron antes que él: “Vive rápido y muere joven”. De esta manera, Sid dejó otro bonito cadáver en el cementerio del rock.

La historia podría acabar aquí; pero no es así. El cadáver del controvertido Vicious no descansa exactamente en un cementerio. Su madre llamó por teléfono a la madre de Nancy para enterrar al bajista junto a su eterna compañera; sin embargo, ésta se negó. Entonces Beverley tomó su propia decisión, se dirigió hacia el cementerio de Philadelphia donde estaba enterrada Spungen, saltó la verja y dejó caer las cenizas sobre la tumba de Nancy para que así la pareja permaneciera junta durante toda la eternidad. Un acto muy romántico, ¿eh?


Una historia tan trágica como ésta no podría terminar con un final tan apasionado. Para el manager de los Sex Pistols, Malcom McLaren, el desenlace resulta completamente diferente: la madre (esta mujer era para darle de comer aparte) estaba tan borracha que dejó caer la urna donde estaban depositadas las cenizas de su hijo nada más y nada menos que en el aeropuerto; concretamente en la Terminal 1 del aeropuerto de Heathrow de Londres. De aquí surge la leyenda de que el fantasma de Sid Vicious se encuentra vagando por los conductos del aire acondicionado de este aeropuerto.

Así que si alguna vez tenéis que coger un avión en la Terminal 1 de Heathrow, guardad el polvo en un frasco y después viajad hasta la tumba de Spungen para que por fin los amantes se puedan reencontrar a su manera.



Hay amores que matan y hay amores que se los lleva el viento. Éste es de los dos.

Nos veremos en el Lado Oscuro del Rock…

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Baboso, cuando tengas un grupo de éxito como el mio ven a hablarme, hasta entonces que te den.

Mister Pink dijo...

Compañera y sin embargo payasa, Irenina (camuflada como John Paul Jones).
Tu parecido con el bajista de Led Zeppelin es razonable. Sin embargo, a mí me han dicho que también me doy un aire a John Lennon. Y que yo sepa, los Beatles son más conocidos que Jesucristo y que Led Zeppelin.
¿Quién tiene un grupo de más éxito? ¿Eh?

Anónimo dijo...

el otro día hice una cosa con el capote...que sólo se le ocurre a un genio ak ak ak

Mister Pink dijo...

¿Tú sabes de lo que me entran ganas? De venderlo todo e irme a una isla desierta. Para tomarme una cervecita con mis amigos y hacerles un arroz y hacerles un guisito y disfrutar y...

Anónimo dijo...

Yo venía a comentar, pero no me entero de nada.
Eso de mezclar a Mr. Pink con Sid Vicious (que parece nombre de un malo de Star Wars) y John Lennon (y Spielberg, al que te pareces más aún, aunque con una gorra de ET es más fácil parecer un psicokiller que lleva muñecas hinchables en la furgoneta)... en fin, que no puede salir nada bueno. Sólo falta que empeceis a aplaudir por bulerías de repente: Vamos, venga, sal a bailar, que tú lo haces fenomenal, ole oleee

Mister Pink dijo...

Enjuta Mojamuta! Ehhhhhhhhh!

Ya estamos todos en:
a) esta jaula de grillos
b) este diálogo de besugos
c) como quieras llamarlo
d) todas las anteriores son falsas
e) todas las anteriores son verdaderas

Por cierto, ¿cómo te has enterado de lo que las muñecas hinchables? Seguro que fue Josefina quien se fue de la lengua. Y eso que después de esconderla en la furgoneta le dije: "Quédate aquí en el vehículo y no digas nada". Y me respondió ella: "Shhhhhhhhh".

Anónimo dijo...

eyyyy, mola, mola! me gusta el blog y me gusta sid vicious! la verdad es que su biografía es de las más tristes del rock, con esa infancia no se podía esperar otra juventud. una lástima...

un saludo y enhorabuena por el blog, sigue asi!

Mister Pink dijo...

Muchas gracias, Ligeia, y bienvenida al Lado Oscuro (que no gótico) del Rock.

¡Pobre Sid! Basta con mirar a Ma Vicious y darle la razón al refranero: De tal palo tal astilla.

nectarinas dijo...

sid vicius me follo 7 veces antes de morir

Mister Pink dijo...

Normal, porque si te lo hubieras montado con él después de morir se consideraría necrofilia.